Sumario: | La fe en el justo juicio de Dios sobre toda persona pertenece al patrimonio bíblico. Jesús reconoció ante todo los signos de los tiempos, juzgando que Juan el Bautista era un hombre enviado por Dios. Este juicio funda toda la continuación de su misión. Con sus palabras, Jesús invita a juzgar por uno mismo, a juzgar del mismo modo en que juzga Dios. Todos los seres humanos tienen sed de justicia, como lo muestran, por ejemplo, las novelas policíacas. Contemplando a Jesús mientras dialoga con Zaqueo o con la samaritana comprendemos qué quiere decir juzgar según Dios.
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