| Sumario: | La fuerza purificadora y la capacidad transformativa que en sí misma posee la virtud de la caridad, son puestas de manifiesto por el beato Marcelo Spínola. Se trata de la caridad sobrenatural que reina en el seno de la santísima Trinidad, y de la que el hombre es hecho partícipe. De esa virtud divina brota el admirable prodigio, que don Marcelo denomina "las operaciones de la caridad" y que conforman las actividades y obras apostólicas que el ministro ordenado realiza en el desempeño de su misión pastoral. El ejercicio de la caridad cristiana en la vida y el ministerio del cardenal Spínola, sólo se puede entender partiendo de este principio teológico fundamental que nuestro protagonista vive de manera admirable. En síntesis, la clave primordial sobre la que se sustenta el servicio de la caridad en el beato Spínola y que constituye la fuente de todo su quehacer apostólico, lo constituye el amor sobrenatural que encuentra su origen en Dios, uno y trino, y del que el hombre es colmado cuando acoge en su vida la intimidad de amor que las tres personas divinas le donan. De esta forma, queda capacitado para transmitir a los demás este amor divino a manera de servicio caritativo.
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