“…Un equipo de cuatro catequetas, pedagogos y catequistas –Elisa Calderón, SMR, Angelita Gómez Rubio, María Luisa García Núñez y José Luis Saborido Cursach, SJ– han recogido esas narraciones dándoles forma y completándolas con advertencias y actividades al servicio de los catequistas, de los padres y de los abuelos, poniendo así en sus manos toda la riqueza teológica, pedagógica y catequética de los relatos, para dar a conocer a Jesús a los niños como complemento de las catequesis en su iniciación cristiana. …”

“…Este hecho da pie a reflexionar sobre la relación entre teología y catequesis, a mirar el servicio de la catequesis que nos ha precedido, a plantear qué aportan la catequesis, los catecismos, los catequistas...; a vislumbrar los retos, los desafíos, a los que se enfrenta la iniciación cristiana en la sociedad de hoy…”

“…Un catecismo bellamente ilustrado para que los cristianos más pequeños, acompañados por sus padres y/o catequistas, puedan comenzar a sentir a Dios como Padre que nos ama, a conocer Jesús como Hermano nuestro, a descubrir al Espíritu Santo como Señor y dador de vida, y a desear vivamente formar parte de esta gran familia que somos la Iglesia…”

“…Esta pequeña obra está pensada para todas las personas que quieran iniciarse en el menejo y disfrute de la Sagrada Escritura. ante todo, pensamos que será de gran ayuda para la formación y la labor de las catequistas. Esperamos que este librito con afán divulgativo cumpla con su objetivo y sea inteligible por la sencillez, pedagógico en la exposición y oportuno en el contenido…”

“…Finalmente incluye algunas claves dirigidas específicamente a los animadores o catequistas que trabajan en unión con las familias en la preparación del bautismo de sus hijos…”

“…Los relatos están pensados para que los adultos de la familia -padres, madres, abuelos y abuelas- y los catequistas de las comunidades cristianas sean más eficaces en su tarea de iniciar en la fe a los más pequeños (niños y niñas hasta los sietes años) mediante una catequesis narrativa y viva que les ayude a dar los primeros pasos en su despertar religioso. …”

“…Mediante la acción misionera ha de renovar la alegría en laicos y familias para ser catequistas y hacer catequesis, ha de fortalecer la esperanza en párrocos y sacerdotes para alentar a las comunidades y ha de impulsar a los consagrados a manifestar el gozo del servicio en su entrega diaria. …”