| Sumario: | El nuevo Mester de Clerecía es un auténtico grupo profético dentro de la actual cultura española que supo incluir el desafío del Concilio Vaticano II y aporta una respuesta, la renovación de la poesía religiosa. Los diez liricos sacerdotes que figuran en esta antología son otras tantas variantes de una honda inquietud espiritual y estilística. Frente a la poesía trasnochada e ineficaz puramente devota ellos ofrecen una lírica temática y formalmente abierta, de enorme atractivo que ha conquistado un puesto decisivo en el panorama literario.
El mediterranismo refinado de Bertrán, la intimidad abismática de Blajot, la grandiosa visión de Castro, el existencialismo de Tomé, el carisma de Casaldáliga, la orquestación de Carlos de la Rica, el asombro cósmico de Martín Descalzo, el fuego interior de Alfaro, el humanismo de García Hernández o la mística parábola de Herrero Esteban diversifican el amplio espectro de esta antología, verdadero texto canónico de la nueva estética religiosa.
Con el empuje vital de los viejos líricos medievales, pero con hondo cmpromiso del humanismo de hoy, convierten la zozobra del hombre de nuestros días en salmo y alegato, plegaria y testimonio, belleza y profecía. La poesía religiosa, escrita por sacerdotes, vuelve a reverdecer de este modo toda una gran tradición patrística y sálmica.
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