Meher Baba

Meher Baba (Pune, 25 de febrero de 1894-Meherazad, India; 31 de enero de 1969) fue un gurú (maestro espiritual) indio que declaró ser el avatar, Dios en forma humana. Una figura espiritual del ,tuvo cientos de miles de seguidores, principalmente en la India, además de grupos más pequeños en Norteamérica, Sudamérica, Europa y Australia. A partir del 10 de julio de 1925, guardó silencio durante los últimos 44 años de su vida, comunicándose con sus discípulos inicialmente a través de un tablero alfabético, pero cada vez más a través de gestos por medio de un intérprete. Comentó que había venido «no a enseñar, sino a despertar», y añadió que «las cosas que son reales se dan y se reciben en silencio».
Nacido en el seno de una familia zoroástrica de ascendencia persa, a los 19 años conoció a una anciana musulmana, Hazrat Babajan, la primera de cinco «maestros perfectos» (personas espiritualmente iluminadas o «realizadas por Dios») que durante los siete años siguientes le ayudaron a encontrar su identidad espiritual propia. Según Meher Baba, esa identidad era la del avatar de su era, término que interpretaba como la encarnación periódica de Dios en forma humana, situándose a sí mismo entre figuras religiosas universales como Zoroastro, Rama, Krishna, Buda, Jesucristo o el profeta Mahoma: «Soy el mismo Antiguo venido de nuevo en medio de vosotros», dijo a sus discípulos, declarando que todas las grandes religiones son revelaciones de «la Realidad Única que es Dios».
Entre 1931 y 1958 realizó numerosas visitas a Estados Unidos y Europa, y en una de ellas, en 1952, estableció el Centro Espiritual Meher en Myrtle Beach, Carolina del Sur. Un centro similar, la Morada del Avatar, fue creado en Woomby, Queensland, Australia, en 1958.
Desde mediados de la década de 1960, Meher Baba se mantuvo en reclusión y, durante ese período, varios consumidores de drogas recreativas de los Estados Unidos trataron de localizarlo en busca de verdad espiritual. A través de ellos, sus advertencias contra el uso no médico de drogas psicodélicas y de otro tipo llegaron a los medios de comunicación de Estados Unidos y otros países occidentales. Meher Baba advirtió explícitamente a los jóvenes que «las drogas son perjudiciales mental, física y espiritualmente», tratando de acercarlos a una vida espiritual.
Tras su muerte en 1969, sus seguidores hicieron caso a su deseo de no formar una organización, pero siguieron reuniéndose informalmente y con frecuencia para debatir y leer sus obras y expresar a través de la música, la poesía, la danza o el teatro sus reflexiones sobre su vida. Su tumba (''samadhi'') en Meherabad, cerca de Ahmednagar, se ha convertido en lugar de peregrinación para sus seguidores de todo el mundo. proporcionado por Wikipedia